Hoy, 21 de junio 2020, el Sol “se apaga” brevemente para llamar la atención de nuestras conciencias. Este año tienen lugar, al mismo tiempo, el solsticio de verano y un eclipse anular de sol.
Se dice que esta conjunción astral es un buen momento para iluminar esos lugares oscuros de nuestra consciencia y darnos cuenta de muchos aspectos de nosotros mismos. La situación actual, de crisis sanitaria, ya nos ha advertido que los seres humanos formamos parte de un gran sistema, junto a la naturaleza y el resto de seres vivos. Creo que va llegando la hora de que abramos los ojos y nos demos cuenta que todos los seres estamos interconectados, somos interdependientes y todos somos, en definitiva, lo mismo. El trabajo puede empezar por mirar hacia dentro y ver que podemos tratarnos con más amor a nosotros mismos, aunque a veces resulte incómodo, porque solo así seremos capaces de darle al mundo eso que necesita.
Se dice que los eclipses activan las temáticas a resolver durante los próximos 6 meses. Así que os animo a aprovechar este momento y esta energía, para conectaros con la luz del sol a través de la meditación.
Esto puede hacerse con los ojos cerrados visualizando el sol o viendo el eclipse con el instrumental de protección adecuado para no dañarnos los ojos. Al meditar se visualiza la luz del sol ingresando a nuestro cuerpo y bañando con luz el mundo, purificando nuestro cuerpo y el mundo de negatividades.